25 ago 2011

Mis creencias

Según por ciertas teorías.
De algún antiguo profeta
Ayer existió un poeta
Que hoy vive en la mente mía
Y en ranchos y en pulperías
Donde se enciende un fogón
Se nutre mi inspiración
Por un don iluminado
Obedeciendo al dictado
De aquella reencarnación.

Si el espíritu del hombre
Se reencarna en otro ser
Logrando permanecer
Con distinta vida y nombre
Aunque exista quien se asombre
Por tener otras creencias
Yo por ciertas experiencias
En esta razón me fundo,
Nadie sabe en este mundo
El principio de su existencia.

Sin tener ilustración
Por las universidades,
Solo por las facultades,
Por natural intuición
Sin tener mas instrucción
Que a duras penas escribir
Me gustaría ver venir si es
Que existe en el planeta el ilustrado poeta
Que me quiera discutir.

Cuando el hombre en su creación
Vió en sí mismo su existencia,
Formó en él una creencia que le llamó religión.
Creando en esa educación
Una fuente de saber,
Ya que dios a mi entender,
Algo invisible con nombre,
Imaginación del hombre
Que lo convirtió en un ser.

Pues nadie podrá saber
Con toda su inteligencia
De ande viene su existencia
Y el principio de su ser.
Solo podemos creer de lo
Que en otros tiempos fuimos
De que en el mundo existimos
Y como en el mundo andamos,
De que manera nos vamos
Pero no de ande vinimos.

Hoy solo podemos leer
Lo que el hombre primitivo
Dejó impreso en sus archivos
Para enseñarnos a creer
Pero quien ha de poder
Con criterio discutir
O exactamente decir
Con todas sus profecías
Desde que tiempo existía
Para cuando aprendió a escribir.

Al lograr su evolución
El hombre empleó su ciencia
Y volcó su inteligencia
Para su propia destrucción.
Y llevado por su ambición
Siendo tan inteligente
Hoy destruye ferozmente
Sin detenerse un segundo
Lo que tiene sobre el mundo
Para vivir cómodamente.

No es con tanta inteligencia,
No descubre en su importancia
En sí mismo esa ignorancia
Que destruye su existencia
Y al avance de su ciencia
Se irá destruyendo más
Ya que no podrá jamás
Mientras no cambie de norma
Poder inventar la forma
De poder vivir en paz..

Si lograra meditar
Sobre tanta destrucción
Desterrando su ambición
Y su modo de pensar
Dedicándose a estudiar
Para combatir el horror
Comprendería con dolor
Ante tales experiencias
Que con menos inteligencia
Viviría mucho mejor.

Autor: Augusto Romero